Hoy nos vamos hasta Cerdedo (Cotobade), una bonita localidad que encontramos a unos 22 km desde la ciudad de Pontevedra.
Un lugar fantástico y de gran riqueza tanto natural como patrimonial, con muchas opciones para pasar un día estupendo con los peques.
Lo primero que vamos a hacer es bajar a la playa fluvial y su área recreativa. En verano es una opción fantástica con los más pequeños, pero en invierno también se puede disfrutar toda la zona del río do Castro (afluente del Lérez).
La playa tiene una zona de baño formada por una presa en el río y una pequeña piscina para los peques. Cuenta con una zona de cesped y otra de arena, duchas y un agradable chiringuito con vistas hacia la playa en el que podemos comer o tomar algo (solamente abierta en verano), también aseos.
Además, una pequeña zona con mesas, bancos de piedra y barbacoas para comer.
Al otro lado de la carretera hay una zona para actividades deportivas, desde allí podemos hacer alguna ruta para disfrutar del entorno.
Muy cerquita, a tan solo unos metros del área recreativa, encontraremos el conjunto etnográfico de San Antón. Lo más bonito y llamativo es que caminaremos por una antigua calzada romana en muy buen estado de conservación, además del puente románico, del siglo XIII, y la ermita de San Antón y su cruceiro. Una visita muy recomendable por todo el patrimonio histórico que podemos encontrar en tan poco espacio.
Y si algo representativo de estas tierras son las eiras o eirados, que son conjuntos de hórreos en zonas comunales. El concello de Cerdedo – Cotobade cuenta con algunas de las mejor conservadas, catalogadas como bienes patrimoniales.
Hace unos días os contaba AQUÍ la visita a uno de los eirados que más nos llamó la atención, a «Eira da Ermida» por su ubicación, con unas vistas al valle fantásticas y por su buen estado de conservación al lado de la ermita de la virgen de los Remedios. Sin duda merece la pena desplazarse 7 km desde Cerdedo.
Otro que nos queda muy cerquita, pero mucho menos llamativo es «Eira da Pena«, está a tan solo unos metros de la Plaza del Concello de Cerdedo, y cuenta con 9 hórreos.
De esta manera también podremos dar un paseo por las callejuelas de la localidad e incluso jugar un rato en la plaza del Concello, que cuenta con mobiliario para tal fin, como mesa con parchis, la oca, mesa de ping pong, …
Y la última visita será a «Eira Grande«, en el pueblo de Pedre, que agrupa 12 hórreos rehabilitados. Aquí mismo podemos hacer un juego con los peques a ver si encuentran unos pequeños hórreos 😉 y es que en una de las casas próximas las chimeneas están decoradas con ellos.
En Pedre, también podemos visitar el puente de Pedre, cuya autoría se atribuye a Pedro de Pedre, el padre del Maestre Mateo, autor del Pórtico de la Gloria (aunque nosotros no llegamos hasta allí).
Y hablando de puentes, ya de vuelta hacia casa, si todavía no conocéis el puente de Almofrei, nos queda de camino y también pertenece al concello de Cerdedo, merece mucho la pena. Tenéis toda la información AQUÍ.
Para comer, si queréis algo rico y en sitio muy especial, podéis desplazaros un poquito (hasta Paraños, unos 16km desde Cerdedo) allí encontraréis «Mamá Lela». Conste que nosotros todavía no hemos probado pero siempre he oido hablar maravillas de su comida y creo que merecerá la pena 😉 (necesaria reserva previa). AQUÍ la ubicación
Y esto es todo, un día muy completito para toda la familia, verdad?